Después de 20 años Lionel Messi deja el FC Barcelona de una manera que nadie esperaba: siendo su nuevo contrato con el conjunto catalán declarado improcedente por La Liga debido a las cuantiosas deudas del club. Con la salida del argentino se da fin a la mejor era del equipo blaugrana, donde de la mano de Messi consiguieron 4 Champions League, 10 ligas de España y 8 Copas del rey.
La entidad que preside Joan Laporta afirmó en un comunicado que se había llegado a un acuerdo “con la clara intención de ambas partes de firmar un nuevo contrato en el día de hoy”. Algo que “no se podrá formalizar debido a obstáculos económicos y estructurales (normativa de La Liga española)”.
Esto es debido a que el Barcelona ha superado los límites que La Liga impone a cada club para inscribir a su plantilla deportiva, dentro de su sistema de control económico para evitar deudas. Ese límite se fija según los ingresos de cada club, reducidos sus costes estructurales y los pagos de deuda. Cabe recordar que la deuda neta de los blaugranas se sitúa en un total de 1.173 millones de euros.
La disminución de ingresos debido a la pandemia (falta de ingresos por entradas, disminución de patrocinadores) y la elevada deuda del FC Barcelona ha mermado su margen salarial de 671,4 millones para esta temporada, el cual excede solamente con los pagos de una de las plantillas mayor pagadas del panorama futbolístico mundial. La única manera de solventar el fichaje del argentino (fichaje y no renovación porque el contrato de Messi finalizó el 30 de junio) era deshaciéndose de las fichas más elevadas de su costosa plantilla, algo que no ha sucedido. Además, el club ha firmado durante el verano a cuatro nuevos futbolistas, cuya inscripción también estaban en el aire si continuaba Messi. Al rebasar el club culé el límite salarial, este solo puede inscribir las nuevas incorporaciones por un valor equivalente al 25% del ahorro que consiga por plusvalías en la venta de jugadores o por el ahorro de salarios. Es decir, que para fichar a “lio” debía ahorrar más de 200 millones.
Ahora el mejor futbolista del mundo se encuentra sin equipo pese a que, a diferencia del año pasado, había hecho todo lo posible por quedarse. El Barcelona pierde al mejor jugador de su historia, debido a los malos manejos dirigenciales de la gestión de Bartomeu, que han dejado al club en la peor crisis financiera de su historia. Las deudas en el mundo deportivo se han vuelto algo común y que en el Perú han afectado a clubes como Universitario, Alianza Lima, Melgar y Sport Boys. Las malas praxis financieras alejan a Messi de su casa. A la hora en que se cierra este artículo, “la pulga” tiene casi todo cerrado con el PSG francés donde armará un super equipo con Mbappé, Neymar y Sergio Ramos. Pero como alguien que conoció el fútbol gracias a Messi, verlo con otra camiseta simplemente no parece estar bien.
