Analista en temas políticos, Fernando Rospigliosi, cuestionó también la extrema indiferencia y desidia con la que son vistos estos hechos violentos, perpetrados por las comunidades indígenas, por parte de la mayoría de opinión pública y, en especial, por el gobierno central.
RCR, 11 de diciembre 2018.- Resulta “increíble” que las acciones coercitivas y violentas de las comunidades nativas de Loreto contra la infraestructura y el oleoducto Norperuano queden sin ningún castigo, ni responsabilidad por parte de sus ejecutores, denunció el analista en temas políticos, Fernando Rospigliosi.
“Sí, por supuesto… Es increíble que esto ocurra… Hay pequeños poderes en cada lugar. Y, sobre todo, crece la violencia, ¿no? Yo hago lo que me da la gana y nadie puede decirme nada. Yo salto encima de la ley; violo la ley y no soy responsable de nada. Eso es muy peligroso”, subrayó.
Recordó que en la Región Loreto existen muchas comunidades que se han dedicado literalmente a romper el Oleoducto Norperuano, ya que -anotó- “ese es el mecanismo de presión que tienen”.
“Rompen el oleoducto y después, además, no dejan que entren los trabajadores para repararlo. En este momento está suspendido el tránsito de petróleo por el oleoducto norperuano de una buena parte del petróleo que se produce allá, que ya es poco, hacia la costa”, anotó.
En diálogo con Red de Comunicación Regional (RCR), Rospigliosi cuestionó también la extrema indiferencia y desidia con la que son vistos estos hechos violentos perpetrados por las comunidades indígenas, por parte de la mayoría de opinión pública y, en especial, por el gobierno central.
“Por supuesto que a nadie interesa, menos al gobierno. El gobierno no tiene la menor intención de meterse en problemas con nadie. Entonces, cualquier asunto que pueda bajarle su popularidad, simplemente lo evade. Y como tiene el respaldo de la mayoría de medios de comunicación y de toda la coalición antifujimorista, nadie les dice nada”, enfatizó.
En ese contexto, advirtió que esta situación de descontrol se va a ir agravando, porque -anotó- si estas personas quedan impunes, después de destrozar el oleoducto y de impedir que haya un proceso electoral, otros están mirando lo que ocurre allí y van a imitarlo. “Entonces, la situación es crítica”, alertó.
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