RCR, 20 de mayo de 2020.- Pablo de la Flor, director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía, sostuvo que el sector de hidrocarburos del Perú está pasando por peor etapa económica de su historia debido a la crisis nacional e internacional de la industria del crudo. En ese sentido, demandó al Gobierno asumir medidas urgentes como la reprogramación del pago de regalías al Estado por tres meses y una revisión de dichos pagos para que el sector sea más competitivo a nivel internacional.
“Esta crisis es producto de la convergencia de dos elementos destructivos. Por un lado, la contracción de la demanda que es casi del 70% durante la cuarentena. Eso se traduce en la caída importante de los niveles de consumo. Por otro lado, a nivel internacional por la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita hubo una caída dramática de los precios de los combustibles. Producto de esas dos dinámicas tenemos una situación insostenible para la industria de hidrocarburos nacional”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Señaló que el sector ha solicitado al Ejecutivo que asuma medidas de emergencia que permitan salvaguardar miles de puestos de trabajo que se ven amenazados frente a la eventualidad del cierre de operaciones. “Ya tenemos 15 contratos suspendiendo sus operaciones. También el Oleoducto Norperuano ha dejado de operar hace casi un mes. Estamos en una tormenta de consecuencias dramáticas para el sector y creemos que es momento de actuar con firmeza para evitar el cierre de estas operaciones”, indicó.
“Estamos pidiendo la reprogramación de las regalías por tres meses y más importante es que se rediseñe el sistema de pago de regalías y compensaciones, para que las empresas del sector sean más competitivas. El nivel de regalías que el Perú tiene en la actualidad hace que estas empresas sean poco competitivas, estamos hablando de 30% a 50%. Las regalías es la proporción que se transfiere al Gobierno más allá de los impuestos”, remarcó.
Sostuvo además que esta es la peor crisis económica que el Perú va a enfrentar en su historia republicana a excepción de la que ocurrió después de la Guerra con Chile. “En Lima ya se han perdido 1 millón 200 mil puestos de trabajo en lo que vamos de la cuarentena. Esto es aproximadamente el 20% de trabajo formal. Estamos estimando que los niveles de pobreza este año van a crecer en un 8%, es decir en tres meses vamos a retroceder a los mismos niveles de pobreza que teníamos hace 10 años. Hemos perdido 10 años de lucha contra la pobreza producto de esta crisis económica”, afirmó.
“Tenemos que revisar nuestra cartera de proyectos e impulsar aquellos que están más próximos y que tienen la posibilidad de implementarse rápidamente a fin de generar dinámica de reactivación que la economía peruana tanto requiere. Es momento de revisar alguna de estas opciones con desapasionamiento, pensando en el bienestar del país y sobre todo en la necesidad de superar la crisis tan terrible que estamos viviendo”, comentó.
Catástrofe sanitaria y económica en Loreto
De la Flor dijo que la devolución de los lotes petroleros en Loreto se va a traducir en la suspensión de empleos y despidos masivos por un lado. “Por otro lado, va a haber una caída de la producción porque estamos produciendo menos de la mitad de lo que producíamos hace tres meses. Esto también se va a traducir en menos canon y regalías. El canon se ha reducido en algunas localidades a la cuarta parte de lo que se transfería hace unos meses”, informó.
“Esto no solo va a afectar el empleo local, sino que va a afectar las finanzas de los gobiernos regionales y locales, además de la recaudación del fisco. Las regalías constituyen uno de los principales mecanismos de financiación que tiene el tesoro peruano. Estos recursos junto con el del sector minero son las dos principales fuentes de ingreso en materia de pago de impuestos para el Estado peruano. Solamente en el noreste hay 15 mil puestos de trabajo bien remunerados”, dijo.
Subrayó que la crisis del sector hidrocarburos ya está afectando a Loreto, debido a que el canon que en enero estaba a 6.5 millones de dólares, ya cayó en abril a 720 mil dólares, es decir a la sexta parte de lo que se pagaba. “Esto va a tener un efecto dramático en Loreto y en momentos en que la emergencia sanitaria exige mayores recursos para enfrentar la pandemia. Ahora tenemos un descalabro completo de las finanzas de Loreto. Estamos frente a un colapso de las finanzas de esa región”, lamentó.
Por otro lado, dijo que “es lamentable la situación en materia de ejecución de gastos en las regiones. No es posible que después de tantos recursos transferidos, los gobiernos regionales tengan un nivel de ejecución que está por debajo del 60%. No se ha invertido adecuadamente los recursos en áreas prioritarias como el cuidado médico y el acceso a la salud, y esta situación nos está pasando la factura hoy en día. Y no es un problema que se ha generado por falta de recursos, los recursos han estado ahí. Esa situación hay que revaluarla”, aseveró.
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