Exviceministro de Minas, Rómulo Mucho Mamani, lamentó también que el conflicto de La Bambas haya quebrado prácticamente nuestra proyección de ingresos por la exportación de cobre, aunque los efectos en la economía nacional se noten posteriormente; por lo que –dijo- “no podemos permitir que esto siga adelante”.
RCR, 5 de abril. La situación de entrampamiento en que se encuentra el conflicto entre los comuneros de Fuerabamba (Apurímac) y la mina Las Bambas solo podrá ser resuelta con la intervención de un interlocutor válido del gobierno que inspire confianza en la comunidad para asegurar el diálogo y las soluciones correspondientes, recomendó el exviceministro de Minas, Rómulo Mucho Mamani.
“Hay que hilar fino. Yo recomiendo al gobierno buscar el interlocutor válido. Primero, que logre que la comunidad vea que el Estado inspira confianza. Ya que la confianza es la primera condición para el diálogo… El Estado tiene que encontrar a estas personas que se acerquen. Yo había recomendado (también) que las negociaciones tenían que ser allí. No en Lima, en Cusco o en Abancay”, subrayó.
Agregó que una vez logrado este primer objetivo debe pasarse a una segunda etapa, consistente en convencer a los comuneros sobre la necesidad de desbloquear la carretera y los accesos a la mina, sin violencia.
“Tercero, tienen que hacerles entender que es la Fiscalía (el Poder Judicial), y no el Poder Ejecutivo, es el que ha dispuesto la prisión preventiva de tres años para los hermanos Chávez Sotelo”, anotó.
En ese sentido, insistió en que la comunidad de Fuerabamba tiene que entender clarísimamente que una cosa es el justo reclamo por daños, compensación o lo que fuere y, otra, muy distinta, es la extorsión.
“Esto es clave para hacer entender en este momento (la situación a los reclamantes). Y en un momento en que es punto muerto (las conversaciones)… ¿Por qué quieren que se suelte a esos asesores (legales)? Porque no se inspiran confianza en nadie”, enfatizó.
En diálogo con Red de Comunicación Regional (RCR), Mucho lamentó también que el conflicto de La Bambas haya quebrado prácticamente nuestra proyección de ingresos por la exportación de cobre, aunque los efectos en la economía nacional se noten posteriormente; por lo que –dijo- “no podemos permitir que esto siga adelante”.
“Obviamente. Esta es una mina que produce el 1.07 % del Producto Interno Bruto (PBI), el 2 % d de la producción mundial de cobre. Es una de las minas más emblemáticas y de un alto valor de construcción jamás realizado en el mundo”, remarcó.
Gobierno tiene que actuar con inteligencia para evitar extensión de conflicto social
Advirtió igualmente que el gobierno tiene que actuar con inteligencia para evitar la expansión del conflicto social –hasta ahora focalizado localmente en Fuerabamba (Apurímac)- a lo largo del corredor minero que incluye a las regiones de Apurímac, Cusco y Arequipa.
“La tarea es atender inmediatamente (la crisis) mediante los interlocutores válidos, con la presencia allí mismo y no dejar pasar mucho tiempo. Porque esto (el conflicto) puede convertirse, de local a regional”, apuntó.
El consultor en políticas de inversión y desarrollo recalcó igualmente que mientras exista la pobreza en las zonas andinas y altoandinas, la brecha social siempre va existir y que –anotó- es el caldo de cultivo de todos los reclamos.
“Porque la pobreza no solo tener un bajo nivel de ingresos o de consumo de bienes. Pobreza es también tener malos servicios en Educación, Salud, Seguridad; malas condiciones de vida. Entramos ya en un tema muy complejo: Y, bueno, está en las manos de los que toman decisiones”, puntualizó.
