Representante de la Defensoría del Pueblo de Cajamarca, Agustín Moreno, advirtió también la existencia de “cuellos de botella” en el tratamiento de la violencia familiar y contra la mujer, referidos al acceso de las víctimas a la protección pública y a una atención integral.
RCR, 13 de agosto 2019 .- Los 1 626 casos de violencia contra mujeres e integrantes de grupo familiar, registrados de enero a mayo del 2019, con tres feminicidios consumados, en la región Cajamarca, configura una situación sumamente preocupante, advirtió el representante de la Defensoría del Pueblo de dicha circunscripción, Agustín Moreno.
“Es por esta razón que la Defensoría del Pueblo está realizando audiencias descentralizadas (para exponer la gravedad de estos hechos) a nivel nacional. Esta es la cuarta audiencia que se desarrollará este 27 de agosto, en la ciudad de Cajamarca, en el Centro de Convenciones de la Universidad Nacional de Cajamarca”, subrayó.
Agregó que dichas cifras, registradas en el Reporte contra violencia familiar y sexual del ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables del 2018, se registraron 3 622 casos de violencia contra mujeres e integrantes de grupo familiar, tres feminicidios y catorce tentativas de feminicidios.
Especificó que la cuarta audiencia descentralizada denominada “Basta de violencia contra niñas y mujeres: Justicia sin indiferencia”, abordará tres temas específicos: 1- prevención de la violencia en el ámbito escolar, laboral o familiar; 2- Las barreras que pueden enfrentar la víctimas o testigos para la obtención de medidas de protección; y 3- Las “denuncias sin miedo”, un espacio, éste último, para que personas que son víctimas o personas que hablen por las víctimas, expresen de manera directa hechos de violencia que hayan sufrido”, subrayó.
Refirió que a ellos se aúna la presencia, en el citado evento, la presencia de las más altas autoridades nacionales como los representantes del Poder Judicial, el Ministerio Público, Policía Nacional. el portafolio de la Mujer, el ministerio del Interior, a fin de que participen y den una reflexión de lo que plantee en dicha agencia”, puntualizó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Moreno advirtió también la existencia de “cuellos de botella” en el tratamiento de la violencia familiar y contra la mujer, referidos al acceso de las víctimas a la protección pública y a una atención integral.
“Hay situaciones que deben ir mejorando. La legislación ha mejorado, hay esfuerzos importantes, pero sigue habiendo obstáculos, que hacen que las víctimas no tengan una adecuada tutela: Pero también es importante la prevención”, anotó.
Indicó igualmente si bien hay “un avance coordinado” entre las instituciones públicas que atienden el problema de la violencia contra la mujer, a la vez que un avance normativo, todavía existen deficiencias y situaciones en las que la respuesta sigue siendo tardía.
“Es decir, si hay una respuesta mucho más oportuna, habrá la oportunidad de prevenir que la violencia siga produciéndose e intensificándose. Y, finalmente, prevenir que las mujeres sigan muriendo a manos de sus parejas”, concluyó.
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