RCR, 25 de julio 2019.- La Universidad Particular de Chiclayo deberá cerrar todas sus actividades en un plazo máximo de dos años, al no obtener la licencia institucional de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (SUNEDU).

Una resolución del Consejo Directivo de la SUNEDU establece que la universidad solo aprobó 3 de los 44 indicadores sobre las Condiciones Básicas de Calidad.

El Informe técnico de licenciamiento detalla que la Universidad Particular de Chiclayo no ha implementado sus políticas de fomento y promoción de la investigación, ni cuenta con una estructura orgánica constituida e institucionalizada.

A esto se le debe sumar que tiene una reducida capacidad de gestión de investigación y falta de recursos humanos necesarios para promover el desarrollo articulado y sostenido de la investigación, de forma institucional.

Por otro lado, no pido garantizar que cuenta con una plana docente permanente, que desarrolle su función pedagógica y académica, dado que menos del 10 % de los docentes con carga lectiva tienen un régimen de dedicación a tiempo completo. 

Tampoco garantizó la disponibilidad y recursos para la prestación de los servicios  complementarios en todos sus locales conducentes a grado, ni cuenta con mecanismos y acciones que permitan mejorar la inserción laboral de sus egresados.

La Universidad Particular de Chiclayo ya no podrá convocar nuevos procesos de admisión, pero sí está obligada a cumplir con el servicio educativo para los estudiantes matriculados, hasta la fecha de su cese definitivo.