Fuente : Ministerio de Salud
Equipo multidisciplinario trabaja articuladamente para abordar casos complejos de Tacna y Moquegua
El Hospital Hipólito Unanue de Tacna (HHUT) cuenta con 16 camas hospitalarias para la atención de pacientes que presentan cuadros severos en su salud mental.
“Nuestra institución es uno de los pocos hospitales generales que a nivel nacional cuenta con camas específicamente para hospitalizar pacientes con trastornos mentales”, resaltó el médico psiquiatra, Eddy Vicente Choque, jefe del departamento de salud mental del mencionado establecimiento de salud.
Precisó, además, que es el único hospital en la región que cuenta con unidades de hospitalización en salud mental y adicciones, que atiende a usuarios de Tacna y Moquegua, ya sean del Minsa o de EsSalud
Asimismo, aseguró que el hospital cuenta con un equipo multidisciplinario que trabaja articuladamente para abordar de manera, eficiente, eficaz y efectiva los problemas complejos que requiere este tipo de intervenciones.
Vicente Choque detalló que las personas son hospitalizadas con la finalidad de brindarles estabilización clínica en situación de emergencia psiquiátrica. “Los trastornos mentales que más hospitalizamos son esquizofrenia, trastorno depresivo con conducta suicida, trastorno de conducta alimentaria y adicciones debido a alcohol, cocaína, marihuana, entre otros”, detalló.
Por su parte, el médico psiquiatra Wilson Guzmán Olivera, responsable de las Unidades de Hospitalización de Salud Mental y Adicciones, indicó que actualmente el recinto hospitalario tiene cuatro pacientes hospitalizados, dos de ellos son mujeres.
“Tenemos todas las condiciones para poder atender a los pacientes cuando requieran de hospitalización”, aseguró Guzmán Olivera, agregando que cuando la persona no pueda ser tratada de forma ambulatoria o por consulta, y además está en riesgo la integridad del mismo paciente o de su entorno, es necesaria la hospitalización.
Debemos recordar que el Departamento de Salud Mental del HHUT tiene como objetivos generales el contribuir a reducir el estigma que tienen las personas con trastornos mentales, favorecer la continuidad de cuidados de la persona en el ámbito comunitario a través de la red de servicios de salud mental, reducir costos respecto a la hospitalización de corta estadía y favorecer el inicio del proceso de rehabilitación.
