Especialista recuerda que el Reglamento de tránsito establece que la velocidad al manejar debe ser prudente y de acuerdo a las circunstancias.
RCR, 12 noviembre.- El primer responsable de los accidentes de tránsito es el hombre, no el clima o el estado de las carreteras, expresó Luis Quispe Candia, director ejecutivo de la Asociación Luz Ámbar, al comentar el accidente en Otuzco que dejó 19 fallecidos y 25 heridos.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional, el especialista expresó que en el accidente de esta madrugada en la sierra de La Libertad, el responsable es el conductor, porque debió determinar las condiciones de la vía y el estado del clima para disminuir la velocidad o incluso detener el vehículo.
Quispe Candia agregó que muchos conductores manejan a la velocidad máxima que establece el Reglamento de Tránsito en diferentes tipos de vías, pese a que la norma precisa que ante todo se debe circular de manera prudente.
“El reglamento, si bien pone límites de velocidad, anota que la conducción debe ser prudente y razonable, de acuerdo a las circunstancias, eliminado todo peligro en la vía”, manifestó.
Por eso, el director ejecutivo de Luz Ámbar señaló que la velocidad la establece el conductor, de acuerdo a las condiciones del momento, y no necesariamente debe llegar al límite establecido.
Agregó que el Código Penal determina que el primer responsable de un accidente es el conductor, mientras que la empresa o propietario del vehículo es el tercero civil responsable, pero muchos evaden su culpabilidad.
El especialista responsabilizó a una deficiente investigación o la demora de los fiscales y jueces para ordenar el embargo de bienes, lo que permite al conductor o empresa transferir el bus y otros bienes y cuando se establece la sentencia no hay manera legal para que paguen la reparación civil.
De otro lado, Luis Quispe Candia expresó que en el país no hay terminales terrestres, sino solo paraderos, pese a que el Estado tiene la obligación de promover terminales para transporte de personas, carga y mercancías.
Señaló que un real terminal terrestre opera con las mismas características de un aeropuerto, y permite realizar la fiscalización en un solo lugar, ejercitar la libre competencia ya que los pasajeros pueden elegir el precio y tipo de bus más conveniente entre las diferentes empresas y facilita la administración de la flota de buses.
Escuchar entrevista:
