RCR, 20 de Diciembre 2022 .- Luis Gonzales Posada, exministro de Relaciones Exteriores y exministro de Justicia y Derechos Humanos, dijo que el presidente de México, Andrés López Obrador está perturbando las relaciones con el Perú al anunciar que le dará asilo político al expresidente Pedro Castillo. Señaló que las leyes internacionales y nacionales, prohíben dar asilo político a una persona inculpada o procesada por delitos comunes.
“Lo que ha hecho López Obrador es perturbar sistemáticamente una relación notablemente positiva entre el Perú y México, interfiriendo en asuntos de competencia interna, desconociendo a la actual mandataria, diciendo que no habido golpe de Estado, llamándolo presidente de la República a Pedro Castillo, de quien se siente pues su protector”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Señaló que todas son interferencias muy graves que ha cometido López Obrador y ha arrastrado en su delirio a otros mandatarios de la región. “Han firmado un documento deplorable Argentina, Bolivia, México y Colombia en la misma línea de López Obrador y también ha firmado un documento parecido el gobierno de Honduras. Ellos no reconocen tampoco al actual gobierno y sigue reconociendo como presidente a Pedro Castillo y además en sus argumentos dicen que no habido golpe”, indicó.
“Estamos ante una concertación, una maniobra internacional, que involucra a todos los países señalados más algunos otros, como el caso de Nicaragua, donde el dictador Daniel Ortega también se ha solidarizado con Castillo. El presidente de Cuba Díaz Canel también se ha solidarizado con Castillo y para variar Maduro, un dictador siniestro también respalda a su modo a Castillo”, agregó.
Explicó que el asilo político está regulado por una serie de pactos internacionales suscritos por el Perú y México. “La Convención de La Habana de 1928, la Convención de Montevideo de 1933 y fundamentalmente de la Convención de Caracas de 1954, que textualmente dice: No es lícito conceder asilo político a personas que al tiempo de solicitarlo se encuentran inculpadas o procesadas en forma por los tribunales ordinarios competentes y por delitos comunes”, precisó.
“En el plano interno desarrollamos una ley de asilo político de la cual yo fui el autor, es la ley 27840, que es concreta sobre el asilo político en dos puntos: el artículo cuarto y el sexto. El cuarto dice que se otorga asilo político a los perseguidos por motivos o delitos políticos y cuya libertad o vida se encuentran en peligro. El artículo sexto señala qué no podrá otorgarse asilo a personas que se encuentran implicadas, procesadas o condenadas ante los tribunales ordinarios competentes por delitos comunes, entre otros”, observó.
Respecto a la permanencia de embajadores de Castillo en la Cancillería, dijo que, de acuerdo a la Ley del Servicio Diplomático, primera disposición general, cuando hay un cambio de gobierno, cesan los embajadores políticos. “Ya cesaron, pero siguen actuando presidiendo ceremonias y dando conferencias como embajadores. Es lo que ocurre por ejemplo en España con Maurtua y esto sucede porque no han salido las resoluciones supremas de cese”, apuntó.
Manifestó que Castillo contrató un grupo de embajadores en situación de retiro, para defender sus intereses políticos y blindarlo. “Esa plataforma la integraron embajadores con mucho oficio como Óscar Maurtua que ahora está en España y que fue canciller, Rodríguez Cuadros que también fue canciller y que está en Naciones Unidas, Harold Forsyth que está en la OEA. Este triángulo fue el que organizó la protección y el blindaje Internacional de Castillo, lo cual es una vergüenza, porque eso es propio de un grupo de asalariados”, subrayó.
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