RCR, 24 de abril de 2023.- El doctor Pablo de la Flor Belaunde sostuvo que el Perú podría aprovechar el desacoplamiento de Estados Unidos y China, para incrementar sus relaciones comerciales con el país del Tío Sam. Destacó, por ejemplo, que la industria textil y de confecciones el año pasado exportó más de 1800 billones y esta cifra podría quintuplicarse si se atraen las inversiones norteamericanas.
“El desacoplamiento entre Estados Unidos y China y la reubicación de importantes cadenas productivas a otras naciones como Vietnam, Tailandia, India y México genera importantes oportunidades que el Perú podría rápidamente aprovechar”, dijo en la secuencia “El vigía” de RCR.
Señaló que la industria textil peruana, solo para citar el ejemplo más prometedor, podría apuntalar su crecimiento con la llegada de los nuevos capitales norteamericanos que se están reubicando desde China. “Para eso pues tenemos una gran perspectiva en virtud del tamaño del mercado norteamericano, el hecho de que ya tenemos un TLC vigente y que la cercanía geográfica pues facilitaría enormemente las cosas”, indicó.
Destacó que la industria textil y de confecciones el año pasado exportó más de 1800 billones. “Esa es una cifra que podría quintuplicarse si es que logramos atraer esas inversiones. Sin embargo, para aquello ocurra resulta fundamental que el gobierno cree las condiciones que nos permitan darle las garantías y la predictibilidad que lamentablemente en este momento no le da el país a la inversión”, afirmó.
“Desde esa perspectiva hay una enorme responsabilidad por parte del Gobierno para precisamente permitir que estas condiciones te den y que podamos dar el gran salto en una coyuntura que resultaría sumamente interesante por las oportunidades que presenta tanto en el aumento de exportaciones como la generación de trabajo de calidad para todos los peruanos”, expresó.
Comentó que mientras la atención mundial se vuelca sobre la Guerra de Ucrania, en las costas del Pacífico se libra otro gran conflicto de consecuencias igualmente significativas. “Me refiero a la contienda que desde hace 5 años vienen librando Estados Unidos y China en materia comercial”, precisó.
“Este conflicto comenzó en el 2018 con la imposición por parte de la Administración Trump de una serie de medidas contra los productos chinos. Pekín reciprocó con sus propias medidas arancelarias imponiendo algunas cargas a las importaciones norteamericanas. Esto se ha ido agravando con medidas de lado y lado desde entonces, lo que ha afectado casi la mitad del comercio entre ambos países”, mencionó.
Advirtió que conviene no perder de vista que la rivalidad entre ambas potencias va mucho más allá de los estrictamente comercial y expresa un enfrentamiento más profundo entre dos modelos económicos y políticos irreconciliables. “Por un lado, el de la democracia representativa y su sistema de valores y por otro el del autoritarismo estatal”, apuntó.
“En nuestra región China ha venido expandiendo de manera significativa su influencia en los últimos años convirtiéndose en el mayor socio comercial para Perú, Chile, Brasil, Ecuador y Argentina y en uno de los principales inversionistas en el continente. En nuestro país consorcios chinos están presentes en minería, petróleo, puertos, construcción y el sector eléctrico”, subrayó.
