RCR, 27 de octubre 2025.- El exviceministro de Minas, Augusto Cauti, lamentó que, pese a su gran potencial, Cajamarca continúe siendo una de las regiones más pobres del Perú, debido a la ideologización del discurso minero que ha frenado proyectos importantes. Asimismo, señaló que las trabas y demoras en el Estado a los proyectos mineros formales permiten las invasiones por parte de la minería ilegal.
“En Cajamarca se ha ideologizado el desarrollo minero, ello ha contribuido a que los proyectos no se desarrollen, sobre todo con gobernadores ideologizados que comenzaron a poner en conflicto la minería con el agua, la minería con el agro, bloqueando así varias obras y eso ha impactado en el desarrollo regional e incrementado los niveles de pobreza”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Precisó que Cajamarca debe poner un punto de quiebre a las ideologías y explotar los recursos que posee. “Sin duda la minería es muy importante y podría serlo aún más con una diversificación de metales como el oro y el cobre, que ambos se encuentran en precios muy altos, y con ello aprovechar el desarrollo de actividades económicas”, afirmó.
Ante el avance indiscriminado de la minería ilegal en la región, especialmente en zonas como Chugur, Sinchao, El Tingo, Hualgayoc, Sorochuco, San Ignacio y Santa Cruz, indicó que esta situación se agrava por la burocracia y las trabas a los proyectos formales, lo que deja espacio a la informalidad.
“Mientras más trabas y demoras se sigan generando para el desarrollo de proyectos mineros formales, estas zonas se verán más sujetas a invasiones de la minería ilegal, y si el Estado no genera oportunidades de empleo o desarrollo de otras cadenas, las personas se verán involucradas a esta actividad ilícita porque no todos son criminales, sino que lo hacen por necesidad ante la falta de oportunidades”, enfatizó.
En otra línea, Cauti sostuvo que es fundamental continuar con la depuración del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo) y avanzar hacia un censo minero nacional que identifique a los verdaderos operadores. Por lo que, instó al Congreso a debatir y aprobar antes de fin de año la nueva Ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala (Ley MAPE), que permita formalizar y fortalecer este sector productivo.
“No se puede seguir ampliando plazos como en los últimos 15 años, es momento de hacer algo distinto, con reglas claras, plazos razonables y herramientas de trazabilidad que garanticen un oro responsable y limpio, con esto evitar que se infiltre la criminalidad que impacta tanto a la gran y mediana minería como también a los pequeños mineros que de buena voluntad quieren desarrollar esta actividad”, anotó.
En cuanto a las acciones de interdicción contra la minería ilegal, demandó que estas deben ser lideradas por la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, bajo un Estado de Derecho, y no por ministerios civiles o empresas privadas. “Las interdicciones deben mantenerse, pero también deben ir acompañadas de medidas que beneficien a las poblaciones vulnerables que hoy son extorsionadas por las mafias criminales”, subrayó.
Remarcó que el Ministerio de Energía y Minas debería pronunciarse con claridad sobre el futuro de la formalización minera. “El gobierno tiene pocos meses, pero debe avanzar sobre lo que ya está hecho. No se trata de cambiar funcionarios, sino de asegurar continuidad y resultados”, puntualizó.













