RCR, 26 de agosto de 2025.- El exministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, enfatizó que las nuevas tecnologías hacen posible compatibilizar la minería con la agricultura. Agregó que la sinergia entre ambos sectores ha empezado a consolidarse como una estrategia clave para el desarrollo sostenible, destacando así que no solo son compatibles, sino complementarias.
“La agrominería crea una base social de entendimiento, ambas industrias son compatibles y son necesarias, hoy la tecnología que se usa en minería también se usa en agricultura como los drones, la inteligencia artificial, la digitalización”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Precisó que la gran minería responsable y sostenible puede ser el sostén de la agricultura que se desarrolla en su entorno, aportando a la mejora de pastos, campos, irrigaciones y hasta del ganado. “No se trata de grandes inversiones, sino de voluntad para generar productividad en las comunidades”, expresó.
Tras ser consultado acerca de la trascendencia del proyecto hídrico minero El Algarrobo, impulsado por la empresa minera Buenaventura, en Locuto, Tambogrande. Mucho sostuvo que son ejemplos de cómo la ingeniería puede priorizar el acceso al agua en zonas pobres antes de iniciar operaciones.
“La apuesta por la agrominería no solo se centra en la extracción de minerales, sino en todo lo que implica, empleo de calidad, innovación tecnológica, desarrollo de proveedores y mayores recursos para las regiones. Hablar de ambas actividades es hablar de progreso compartido, cierre de brechas y una oportunidad para el futuro del Perú”, destacó.
Manifestó que experiencias internacionales como Panamá, donde una gran mina, ha demostrado que es posible operar con estándares ambientales, donde la gestión del agua incluye un sistema de recirculación total y vertimientos tratados. “Todo es posible con conocimiento y tecnología. El Perú no puede quedarse atrás, sobre todo cuando tiene recursos que no se agotarán en esta generación”, anotó.
Remarcó que en Agromin Piura se presentarán casos exitosos de convivencia entre agricultura y minería, como el de Colquisiri, una mina mediana ubicada junto a cultivos de frutales destinados a la exportación. “Si se hacen bien las cosas, no tiene que haber problema alguno. La minería moderna exige sellar y encapsular su actividad para convivir en armonía con el entorno”, subrayó.
