Fuente : Diario Uno
La cifra de robos disminuyó alrededor de un 85% debido a la cuarentena y al patrullaje continuo de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. Sin embargo, si la población ya rompió tácitamente el confinamiento, los ladrones también.
Los últimos quince días se han multiplicado los robos en Lima Metropolitana, siendo las principales modalidades: el hurto de celulares, el robo a bodegas, farmacias, minimarkets, así como a distribuidores y transportes de carga.
Cuando se inició la cuarentena a mediados de marzo, hubo una presencia mayor de efectivos, así como continuos patrullajes en las calles de la ciudad, esto ha ido disminuyendo conforme aumentaban los policías infectados de Covid-19, y se daban cuenta del abandono en el que los dejaban, tanto sus superiores como las autoridades del Estado.
Entonces, ese espacio de control y seguridad para toda la población que significaba la prohibición de circular por las calles sólo hasta las seis de la tarde, se ha ido flexibilizando, además ha disminuido la presencia de miembros de la Policía Nacional, y eso está siendo ocupado hoy por la delincuencia, sobre todo la que se dedica a hurtos menores.
Pero lo peor estaría por venir. Pues, cuando se reduzca al mínimo o desparezca la cuarentena y tal vez el coronavirus esté controlado, la crisis económica, es decir, el desempleo y el aumento de la pobreza, será un caldo de cultivo para estos actos ilícitos.
PERCEPCIÓN DE INSEGURIDAD
Según el informe de Seguridad Ciudadana 2019 del Instituto de Defensa Legal (IDL) aproximadamente 9 de cada 10 personas temen ser víctimas de la delincuencia en los próximos doce meses. Además, el perfil de inseguridad se presenta, en mayor proporción, entre la población urbana, y particularmente entre los más jóvenes.
Asimismo, destaca: “Que una situación como esta se mantenga constante durante tantos años es sin duda motivo de preocupación, porque significa que los peruanos y peruanas viven en una situación de miedo permanente. Esto quiere decir que las respuestas del Estado han sido insuficientes y no han conseguido paliar esta realidad”.
El documento indica que entre los posibles delitos que generan mayores niveles de percepción de inseguridad en los peruanos y peruanas encontramos el robo de dinero, cartera o celular (77.0 %) y el robo a la vivienda (70.2 %). Un poco más alejados les siguen los delitos de amenaza o intimidación (37.3 %), estafa (36.1 %), robo de vehículo (30.5 %), extorsión (22.7 %), maltrato y ofensa sexual (15.7 %), y secuestro (14.1 %).
SIEMPRE ALERTAS
La falta de ingresos económicos ha empujado a la gente a recuperar el empleo perdido o a buscar ingresos en otras labores, pero no sólo deben salir con la mascarilla puesta y guardando la distancia debida el Covid- 19, sino igualmente deben estar alertas para no ser víctimas de la delincuencia que cumplió el confinamiento. Las autoridades deben tomar cartas en el asunto, porque la delincuencia a veces es tan mortal como el coronavirus.