Especialista del Instituto Geológico, Minero, Metalúrgico (INGEMMET), Segundo Núñez, manifestó también que los mapas de riesgo de las zonas sensibles a la ocurrencia de desastres naturales, y la información que estos contienen, son muy valiosos, “porque te permite ver qué zonas son altamente vulnerables y que pueden ser afectadas; y (porque) hay algunas medidas correctivas que se pueden implementar”.
RCR, 06 de marzo 2019.– La región de Cajamarca cuenta con al menos 171 zonas críticas por peligros geológicos en las que urge adoptar las medidas de prevención correspondientes para salvaguardar la integridad de las poblaciones que viven en dichas áreas, advirtió el especialista del Instituto Geológico, Minero, Metalúrgico (INGEMMET), Segundo Núñez.
“Estas zonas críticas se identificaron entre los años 2008 y 2010, en que es publicado el trabajo que tenemos. En nuestra tenemos la identificación de estas 171 zonas críticas, que son por deslizamientos, derrumbes (etc)… (Recomendamos) a la población de Cajamarca que vive en zonas de quebradas, estar atentos y buscar una zona segura, si hay un cambio brusco en los caudales de éstas. O, en caso de deslizamientos, si ven un cerro que se agrieta, no duden en informarnos para hacer un estudio puntual de la zona y ver qué medidas preventivas se pueden aplicar para mitigar los efectos”, subrayó.
Refirió que desde el punto de vista geológico, dichas zonas críticas son propensas al deslizamientos, a huaycos, erosiones de laderas, caída de rocas, derrumbes, entre otros tipos de fenómenos.
Además, consideró que al menos 73 familias de las provincias de Cajamarca, San Ignacio y Cutervo deben ser reubicadas ante la posibilidad de nuevos deslizamientos. Agregó que en el sector San Lorenzo, del distrito de Namballe (provincia de San Ignacio), los ingenieros geólogos del INGEMMET constataron daños en 27 viviendas y terrenos de cultivo.
El experto especificó que la distribución de las 171 áreas críticas es la siguiente: Contumazá con 30 puntos sensibles; Cajamarca, con 25; Jaén, con 23; Cutervo con 16; y en San Ignacio, 10, según estudios desarrollados en el 2010 pero que se encuentran vigentes.
“En el caso de Contumazá es (por el) producto de la geología y la geografía. Tenemos las condiciones geológicas, el tipo de roca, las pendientes; la parte hidrogeológica y la combinación de éstas. En el caso de Jaén y San Ignacio, hay zonas en las que Influye la desforestación, y los tipos de rocas, muy susceptibles a estos eventos”, detalló.
En cuanto a la provincia de Cajamarca, dijo que la zona de Puruhuay, en el distrito de Los Baños del Inca, provincia de Cajamarca, destaca como una de las áreas más críticas, en la que -anotó- se constató que el deslizamiento registrado el pasado diciembre afectó viviendas, un tramo de 30 metros de la vía que conduce a varios caseríos y postes de alumbrado público.
“(Recomendamos) la reubicación de estas viviendas. Porque si bien es cierto que el deslizamiento está en proceso, puede haber un avance progresivo o lateral. Que quiere decir. Que hacia la parte posterior del deslizamiento se pueden formar nuevos agrietamientos que pueden afectar a dichas viviendas”, especificó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Núñez manifestó también que los mapas de riesgo de las zonas sensibles a la ocurrencia de desastres naturales, y la información que estos contienen, son muy valiosos, “porque te permite ver qué zonas son altamente vulnerables y que pueden ser afectadas; y (porque) hay algunas medidas correctivas que se pueden implementar”.
“Además, tenemos un inventario geológico -que también está en nuestra página web- de todos los eventos transcurridos, a nivel de toda la Nación. Incluso, los mapas de susceptibilidad sirven para zonificación económica y ecológica. Algunas regiones ya nos han pedido esta información”, anotó.
Como medidas de recuperación de las áreas afectadas por los deslizamientos o huaicos, el especialista aconsejó la necesidad de realizar una adecuada reforestación de éstas, hacer estudios detallados de la zona, y la toma de conciencia, por la población, sobre la ocurrencia de estos eventos.
Asimismo, la aplicación de sistemas de alerta temprana, la limpieza de cauces y quebradas, entre otras medidas.
Ver entrevista…
