Analista político, Marcos Ibazeta Marino, lamentó que la lucha contra la corrupción “no tenga norte”, al tiempo que carezca de solidez e imparcialidad.
RCR, 9 de diciembre de 2019.- La intención del gobierno por controlar la administración de justicia “es evidente”, aunque ya está ocurriendo un cierto resquebrajamiento en las coaliciones que mantiene con los sectores aliados, mediáticos y políticos, que los apoyan, aseguró el analista político, Marcos Ibazeta Marino.
“Para mí es evidente eso (el control de la justicia). Pero ya se le está complicando todo, porque con las cosas que se están poniendo de manifiesto y por los resquebrajamientos de los aliados. Porque El Comercio y todo su grupo periodístico era proclive a este régimen. Apoyaba a este régimen. Repentinamente, eso se ha quebrado”, subrayó.
En ese contexto, se preguntó que con el cierre del Parlamento y pierde credibilidad el Ejecutivo, ¿la institucionalidad del país en dónde queda?
“Tenemos que pensar más. Yo creo que las elecciones (parlamentarias) que se vienen no va a servir absolutamente de nada, si nos estamos yendo en espiral hacia un hoyo profundo. Como que nadie quiere pensar y todos quieren confrontar. Pienso que hay que confrontar con la corrupción, pero no con las instituciones”, puntualizó.
En ese sentido, insistió en que la corrupción en el Congreso hay que perseguirla a nivel personal, pero sin quebrar la institucionalidad del país.
Asimismo, advirtió del peligro de un “descalabro” de la institucionalidad democrática, al indicar que no es tan descabellada la amenaza de la denominada “brisa bolivariana” sobre las democracias de Sudamérica.
“Porque la ‘brisita bolivariana’ no es broma. El control de los colectivos en las calles pretende sustituir la labor del Congreso por algo que está llamándose la ´democracia directa”, apuntó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Ibazeta lamentó también que la lucha contra la corrupción “no tenga norte”, al tiempo que carezca de solidez e imparcialidad.
”No entiendo cómo el Congreso, para nombrar a los nuevos integrantes de la Junta Nacional de Justicia, formula una Comisión, pero donde están todos los responsables del descalabro del sistema de justicia. Y no entiendo que es lo que hace allí el Defensor del Pueblo. El otro problema es que si la Junta Nacional de Justicia se instala, siempre el poder va a tomar su mayor cuota. Y luego viene la evaluación de fiscales y jueces, a nivel nacional. Y allí se decide quiénes se quedan y quiénes se van. ¿Se imagina ese escenario?”, enfatizó.
En cuanto al futuro de los procesos y las investigaciones fiscales y judiciales contra la corrupción, el expresidente de la Corte Superior de Lima, auguró un sombrío panorama, al referir que los actuales operadores de justicia se dedicarán “a ´estirar investigaciones y no hacer nada”; es decir, “administrar los procesos, lo cual es inaceptable”.
“Ahora, hemos visto las listas que se han presentado, y no hay nada nuevo (sobre la futura Junta Nacional de Justicia). Y no hay un proyecto de Estado, porque no escuchado al presidente que tenga un proyecto de Estado o una política de Estado definida, con planes y programas. Estamos andando a tientas. Estamos entrando en un vacío político muy peligroso. Este año que se viene va a ser muy difícil… Cada día que pasa, hay una institución demolida”, alertó.
En otro momento, Ibazeta precisó igualmente sobre la procedencia de la reapertura de una investigación fiscal “cuando aparecen en hechos nuevos, con elementos de convicción suficientes que no fueron tomados en cuenta” en una anterior pesquisa archivada, en referencia al caso de la construcción de un hospital, en Moquegua, que involucra al presidente, Martín Vizcarra, y al actual ministro de Transportes y Comunicaciones, Edmer Trujillo.
“Allí, nadie queda blindado. Allí no hay cosa juzgada. La cosa juzgada es cuando un juez condena o absuelve. Eso es inamovible. Pero en la Fiscalía no. Las investigaciones se pueden reabrir”, concluyó.
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