Luis Guerrero Figueroa, analista político, dice que “la izquierda siempre ha estado atomizada y ya no existe la de antes”.

RCR, 11 de Noviembre 2019 .- La Izquierda de antes ya no existe y los izquierdistas de ahora son unos “caviares” que hablan con el puño izquierdo levantado pero cobran con la mano derecha, sostuvo Luis Guerrero Figueroa, analista político, excongresista y exalcalde de Cajamarca, a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

“La Izquierda siempre ha estado atomizada y ya no existe la de antes. La chapa de ‘caviares’ a los izquierdistas actuales les cae bien, porque hablan con la mano izquierda levantada, pero comen con la mano derecha. Yo creo que la verdadera Izquierda es la que defiende los intereses de la ciudadanía, la calidad de vida, ingresos económicos equitativos, calidad en salud, defensa del ambiente, jubilación digna y ayuda prioritaria a los microempresarios nacionales”,  dijo.

Remarcó que “se necesita incorporar todo lo bueno que el socialismo ha generado en el mundo al capitalismo en su máxima expresión y corregir todo lo malo. La mezcla de estos dos sistemas debe permitir que exista una sociedad con las mejores condiciones de funcionamiento y donde la corrupción esté mitigada al 100%”.

El analista político también indicó que “el cambio de una Constitución no es un tema central, porque cuando se cambian las constituciones (mirando todas las que hemos tenido en el Perú) se cambian básicamente cinco o diez artículos. Entonces, hablemos de perfeccionar la Constitución para evitar el problema de hablar de una nueva Constitución que es lírica y demagógica. Tenemos que mejorar y complementar la Constitución a fin de hacer una que responda a los intereses del pueblo peruano”.

Nuevas elecciones

Respecto a las nuevas elecciones al Congreso, señaló que “la gente no puede volver al pasado y elegir como un congresista a un corrupto, tenemos que personas tiene honestidad, capacidad y experiencia. El asesor tiene que ser un profesional de la más alta calidad y no una persona sin experiencia”.

“En esta nueva elección el pueblo tendrá una mirada de no votar por los corruptos. Esta elección tiene tres objetivos básicos. Uno es la lucha contra la corrupción. Los partidos están debilitados, porque partidos organizados como una institución no existen, son todavía muy débiles, son enjambres de organizaciones que básicamente se basan en personas”, dijo.

Expresó también su esperanza de que “este Congreso pueda hacer que los partidos políticos sean cada vez más institucionales, de tal manera que haya vida política y también militantes que se vayan formando dentro del partido, para que haya una doctrina, un pensamiento, una idea, un plan de Gobierno que se defienda efectivamente, una mística política que ayude a generar una moral política para evita que la corrupción se reproduzca siempre”.

“Los nuevos congresistas (en 15 meses) van a tener que legislar, representar y fiscalizar que son las tres funciones que tiene un parlamentario. Para esto, tienen que hacer planes y proyectos que permitan la vida institucional en el país. Uno es la lucha contra la corrupción y ahí está reorganizar y reformular la ley del Poder Judicial y el Ministerio Público para que los jueces y fiscales no actúen en función de mafias sino en función de la sociedad”, precisó.

Reformas sustanciales

El exparlamentario mencionó que “en América Latina las constituciones tienen sus debilidades en la parte social y económica. El sistema capitalista está en cuestión y está llegando a un nivel de desarrollo que necesita abiertas reformas sustanciales donde la parte social y económica tiene que ser incorporada en la parte del Estado sobre todo en los servicios, la distribución de la riqueza, la propiedad, la generación de recursos que permitan jubilaciones mínimamente dignas”.

Asimismo dijo que “se necesita  de una reforma económica donde la agricultura y la industria puedan ser reformuladas en términos en que la riqueza y los recursos naturales sean bien utilizados. Lo que tenemos que entender es que los recursos naturales son de todos los peruanos”.

“Cuando viene un inversionista capitalista tiene que entender que ya el pueblo peruano está aportando a la empresa el recurso natural que es básico y que ellos solo traen tecnología y capital. Además, ya existe otro aporte que es la mano de obra peruana. La riqueza tiene que ser distribuida entre todos los peruanos y entre los que la generan”, precisó.

Escuchar Entrevista