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GRUPO DE PUEBLA ESTÁ DETRÁS DE QUIENES BUSCAN DESACREDITAR INSTITUCIONES PARA IMPLANTAR DICTADURA COMO LA DE HUGO CHÁVEZ

RCR, 24 de Noviembre 2020 .- El general (r) Roberto Chiabra, exministro de Defensa, sostuvo que el Grupo de Puebla es el que está detrás de las marchas de radicales que buscan desacreditar al Congreso, a la Policía y a la democracia, para instituir en el Perú una asamblea constituyente y una dictadura de izquierda como la de Hugo Chávez en Venezuela. En ese sentido, señaló que la unidad de todos los peruanos es lo único que puede ayudarnos a superar la crisis sanitaria, económica y política.

“Hay una doctrina de izquierda que tiene como primera fase desacreditar al Congreso, ya hemos desacreditado a la Policía, que por hechos no comprobados estamos diciendo que son asesinos del pueblo. Y ahora estamos detrás del Tribunal Constitucional. Quien gana con el desprestigio de nuestras instituciones democráticas. Estamos cerca del Bicentenario y tenemos que empezar de cero y ojalá que empecemos logrando la unidad, porque sin unidad no vamos a superar esta grave crisis”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

“Ellos tienen una doctrina que aplican y nosotros no la tenemos y no aplicamos nada, tenemos una desunión y no hay planeamiento. El Grupo de Puebla busca recuperar todo lo que ha perdido, tenía a (Hugo) Chávez (Venezuela), tenía a (Rafael) Correa (Ecuador), tenía a (Luiz Inácio) Lula (Brasil), tenía a Evo (Morales, Bolivia), tenía a (Michelle) Bachelet (Chile), tenía a los Kirchner (Argentina), la mayoría de países ya los perdió. Este es un efecto dominó, lo que ha sucedido con el estallido social en Chile, lo que sucedió en Colombia, Ecuador y Bolivia obedece a desprestigiar a las instituciones democráticas”, advirtió.

Recalcó que “lo primero que viene es desacreditar a las instituciones para que los ciudadanos no crean en nadie”. “Después viene el copamiento de las instituciones, la infiltración en la educación y en la cultura, que ya la estamos viendo. Hemos visto como solo hablamos de senderistas en el Vraem, sin embargo, tenemos al Movadef y tenemos el caso Perseo que tiene más de ocho años en la justicia y todavía no se hace juicio”, observó.

“El objetivo es la mente de los jóvenes, el teatro de operaciones es la familia y la escuela. Las armas son la infiltración en la educación y en la cultura. La solución es la unidad. Si nosotros vamos a generar una desconfianza generalizada, le estamos haciendo la camita a nuestro país, estamos favoreciendo a gente que no hemos elegido. Ahora una minoría de izquierda está presidiendo el Congreso y la presidencia. Esa es la realidad de nuestro país”, explicó.

“Ellos tienen una doctrina que aplicar y el apoyo de Odebrecht, que fue una maquinaria para apoyar a los países, Evo (Morales)  y (Hugo) Chávez con el petróleo. Este es un movimiento de gente que sabe lo que quiere hacer. Hay diferentes causas. En Ecuador, fue el incremento del impuesto al combustible, lo de Colombia es un incremento del costo de vida, lo de Bolivia fue una gran mentira porque dijeron que había fraude electoral, lo de Chile es una gran mentira que acá nos queremos copiar. En nuestro país estas protestas se hacen a través de las marchas sociales”, manifestó.

Aseveró que “los chilenos van a hacer una asamblea constituyente, pero no es tan fácil”. “En esa asamblea constituyente van a tener que elegir a los constituyentes y para aprobar un artículo se necesita una mayoría calificada, es decir va a ser un país que durante cuatro años no va a tener constitución. El Perú requiere de calidad humana, el problema no es el sistema político ni el modelo económico, el problema son las personas”, apuntó.

Hemos jugado con nuestra democracia

“En este quinquenio hemos estado jugando con nuestra democracia, hemos estado jugando con censuras de ministros, con cuestiones de confianza, con disolución de congresos y con vacancias presidenciales. Yo no sé si esas acciones son democráticas, hay una grave irresponsabilidad política de todos, especialmente en el Congreso y en el Ejecutivo. A eso le sumamos que se nos presenta en este año una emergencia sanitaria, donde el Estado ha demostrado una baja calidad en la gestión y una corrupción”, afirmó.

“Sin embargo, en vez de generar en esa desgracia la unidad entre todos nosotros para ver como salimos, la historia se repite y aparece la desunión, y dentro de esa desunión aprovechan los que no han sido elegidos por nosotros y nos arrinconan. Tenemos un gran desastre en la economía en estos últimos cinco años, por el aeropuerto de Chincheros y por el negociazo en salud del asesor presidencial en temas de salud  (Carlos) Moreno”, indicó.

“Y de salida estamos con un gobierno similar, un gobierno de izquierda moderada, que nadie ha elegido, donde se señaló que iba a ser un gabinete plural que iba a buscar una salida ordenada, pero vemos que es un gabinete formado por gente que proviene de las ONG, que son asesores y algunos viceministros, que no tienen la experiencia para este tan momento difícil. A esto hay que sumarle, que no se sabe para quién estamos jugando”, señaló.

Puntualizó que “el problema es que los 20 años de crecimiento no se materializaron en los sistemas de educación y salud, que hoy la pandemia ha descubierto, es porque se robaron todo”. “Si ese crecimiento se hubiera materializado en tener colegios a nivel nacional y centros hospitalarios de calidad, no hubiéramos sufrido tanto.  Por eso es que somos uno de los primeros países en tener la mayor cantidad de muertos y por eso es que somos la peor economía”, precisó.

“En estos siete meses lo que se espera es que no se cambie nada. Aquí hay que ver como contenemos el contagio, como nos preparamos para una segunda ola, mirando la experiencia de Europa. La segunda ola ha generado mayor cantidad de contagios que la primera y ya superó la capacidad de los hospitales. Después, prepararnos para la vacuna. Segundo, como reducir la inseguridad ciudadana. Tercero, como generas empleo. Y cuatro es elecciones limpias y transparentes. Nada más, porque para siete meses no hay tiempo”, anotó.

“La Policía tiene problemas internos de corrupción, de captación de personal, de formación, de infraestructura, de equipamiento. Esos problemas se pueden resolver con una reforma interna, que hasta la fecha no se ha hecho. La mayoría de ministros que ha tenido el sector Interior son civiles y cada uno ha hecho su reforma manoseando a la Policía. Los dos grandes cambios fueron: cambiarle el nombre al número uno de la Policía, históricamente ha sido director general, ahora es comandante general. El otro cambio es que han eliminado el estado mayor, les han quitado la facultad de planificar”, precisó.

“A la Policía se le echa la culpa, pero donde están los responsables políticos y cuáles son los errores en la ejecución. Si se desacredita mucho a la Policía y se generaliza hay que tener mucho cuidado. Primero, hubo manifestaciones masivas en todo el Perú, pero en el Interior no hubo violencia. El problema es de gobernabilidad y hasta ahora no se escucha ni al ministro del Interior, ni al presidente de la República. Estos aprovechadores, que quieren ser presidente de la República descalifican a la Policía, pero si llegan a ser presidente y cuando tengan que usar a la Policía, que le van a decir”, agregó.

FFAA y ministra de Defensa

Destacó que “las Fuerzas Armadas son un gran ejemplo en estos meses de inestabilidad que hemos tenido en el país”. “Ellos han asumido la responsabilidad que significa estar subordinados al poder constitucional, ellos saben que son del Estado y no del gobierno de turno. Lo mejor que ha sucedido es que han mantenido su neutralidad, porque este es un problema político entre el Legislativo y el Ejecutivo”, dijo.

“Segundo, colocar a una mujer es el gesto que tienen estos gobiernos de izquierda moderada, se espera que tenga una buena calidad de gestión, ella fue viceministra hace 15 años y tuvo un gesto que espero haya madurado, porque se estaba viendo desde el 2003 el tema de las pensiones y ella firmó un acta pero pidió la reserva y lo dijo porque dos días después salía el ministro de Defensa, que fue Wagner, y entraba Flores-Aráoz y cuando le presentaron el acta, primero dijo que no existía y luego dijo que la obligaron a firmar. Ojalá que haya madurado, porque sería grave que un ministro desconozca un acta que ha firmado”, subrayó.