Por su parte, el columnista del portal web político “El Montonero”, Iván Arenas, indicó que el Perú debe empezar a mirar no solamente a Lima, sino a las regiones, como parte del desarrollo nacional; y a la minería como un instrumento para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza.
RCR, 28 de marzo 2019 .- El Estado y el gobierno deberían liberar al presidente de la comunidad campesina de Fuerabamba, Gregorio Rojas, quien ha sido víctima involuntaria y utilizada por intereses económicos, a fin de restablecer la interlocución y el diálogo con el pueblo, y resolver armoniosamente el conflicto entre las comunidades y la mina Las Bambas, sugirió el consultor en temas de desarrollo y gestión social, Julio Failoc.
“En este conflicto hay varias cosas que no están siendo bien manejadas. Haber atrapado al presidente de la comunidad (de Fuerabamba) Gregorio (Rojas) me parece que ha sido un exceso y un error. Y, sobre todo, (porque) la mina ya no tiene interlocutor. Ahora, ¿con quién las comunidades van a negociar con la empresa? Es un problema, (ya que) no está facilitando las negociaciones… Yo aconsejaría al gobierno que suelte al comunero”, subrayó.
Sin embargo, descartó una medida similar para los abogados de la comunidad, los hermanos Jorge y Frank Chávez Sotelo, ya que –anotó- son hartamente conocidos como personas que extorsionan y presionan a la empresa minera.
“Porque ellos ganan un porcentaje de lo que logran sacarle a la mina. A ellos no les interesa que haya proyectos de desarrollo, porque no les cae nada. A ellos les interesa el cash cash (efectivo constante y sonante). Allí está el problema”, anotó.
Tras revelar haber recibido una propuesta de personas allegadas a la comunidad de Fuerabamba para que los apoye en el tema de la interlocución con el gobierno, Failoc dijo estar dispuesto a asumir este encargo si las partes se lo permiten, a fin de evitar que la situación se salga de control y ocurra un posible desenlace fatal para el país.
“Este no es un tema dinerario, sino de salud nacional. Porque se están propalando muchas mentiras. Por allí están circulando (falsas informaciones) de que ha habido cuatro muertos para decir: qué malos son. Y por el lado del gobierno, empieza a circular que han sido apedreados unos helicópteros, tratando de justificar la intervención. Entonces, ni lo uno ni lo otro es aceptable”, puntualizó.
En diálogo con Red de Comunicación Regional (RCR), Failoc consideró también que el gobierno está tan debilitado que, según sus propias estimaciones, no le da más de un mes de duración al gabinete ministerial que preside Salvador Del Solar.
“Ahorita, el gobierno está bien debilitado. La verdad es que, sinceramente, no le doy más de un mes a Don Salvador (Del Solar). Yo tenía mucha esperanza de que él pudiera mejorar los sistemas de comunicación, pero no ha sido así. Y esto (el conflicto de Las Bambas) los ha agarrado de improviso, cuando esto ya se venía venir. Estamos hablando de 56 días de paralización. Le veo poca capacidad al gobierno”, enfatizó.
El economista explicó igualmente que las comunidades tienen un problema de asimetría en la negociación con el Estado y las empresas.
“O sea, las comunidades no tienen la suficiente capacidad negociación. Por eso es que recurren a gente que los engaña, los tima. Les cobran un porcentaje y les ofrecen el oro y el moro. Entonces, allí el gobierno necesita un interlocutor. Las comunidades se han quedado sin interlocutor”, recalcó.
En ese sentido, insistió en que la eventual liberación del comunero Gregorio Rojas facilitaría el acercamiento con las comunidades y restablecería el diálogo, interrumpido por más de cincuenta días.
“Porque ¿con quién van a dialogar? Si los comuneros han dicho no vamos a dialogar, si no suelten a nuestros asesores. Bueno, yo cedo la mitad, pues. Suelto al presidente de la comunidad, y no voy a soltar a gente que está probado que ha extorsionado, y está extorsionando”, remarcó.
Perú debe mirar a las regiones como parte del desarrollo nacional
Por su parte, el columnista del portal web político “El Montonero”, Iván Arenas, indicó que el Perú debe empezar a mirar no solamente a Lima, sino a las regiones, como parte del desarrollo nacional; y a la minería como un instrumento para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza.
“Hay dos países que no se conocen. Y cuando suceden este tipo de conflictos, estos países recién empiezan a mirarse realmente como son. Desde Lima se tienen interpretaciones del conflicto que muchas veces no se ajustan a la realidad. Es el caso de Las Bambas y de todos los conflictos mineros que se suceden, hay que reconocer que este país no mira e interpreta realmente lo que está pasando”, puntualizó.
Además, advirtió que se omite decir que en su momento el ahora presidente, Martín Vizcarra dialogó con las mismas comunidades campesinas el establecimiento de un Plan Nacional de Desarrollo en sus circunscripciones, debidamente presupuestado y con inversiones.
“Lo hizo en Chumbivilcas (Cusco), lo hizo en Tambobamba (provincia de Cotabambas, Apurímac). Y el famoso Plan de Desarrollo de acá en Las Bambas. Sin embargo, de ese Plan no vemos absolutamente nada. Además de eso, el señor (Martín) Vizcarra lo que hizo fue otorgarles beneficios que no estaban en la negociación. Y él, sin embargo, las tomó cuando fungía de mediador”, apuntó.
De otro lado, Arenas dijo que el gobierno se enfrenta a un parte aguas con el gran debate nacional sobre la cuestión minera en el Perú, y del que –anotó- tendrá que zanjar entre el apoyo a la minería moderna o rehuir a su responsabilidad sobre este rol.
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