Fuente : La República
Modalidad. Efectivos policiales vinculados familiarmente con empresas proveedoras del Estado consiguieron millonarias contrataciones. Este es el caso de los Oblitas Bozovich.
Oficiales de la Policía Nacional que tienen familiares que son propietarios de empresas proveedoras aprovecharon su pertenencia a la institución para favorecer con millonarias contrataciones a favor de estas compañías. Esto sucedió con la familia Oblitas Bozovich.
Fue el teniente PNP Leonardo Oblitas Bozovich, quien laboraba en el Área de Logística de la Dirección de Aviación Policial (Diravpol), el que avisó a sus familiares de que la unidad donde trabajaba haría una importante adquisición de emergencia de material para prevenir el contagio del nuevo coronavirus.
En un principio pensaron presentarse con la empresa Bozovich y Asociados Safety, de propiedad de Dora Bozovich Navarro y del teniente Leonardo Oblitas Bozovich. Pero luego desistieron porque temían que sería fácilmente descubierto el vínculo entre el teniente Leonardo Oblitas y la proveedora. Así que decidieron proponerle al gerente de la empresa Ka’Linson Perú, Carlos Díaz Moreno, para contratar con la Diravpol. Esta tarea estuvo a cargo de Patrick Oblitas Bozovich, quien trabaja en Ka’Linson Perú, la cual es contratista habilitada con el Estado. Carlos Díaz admitió ante el fiscal anticorrupción del Callao que está a cargo del caso, Francisco Alarcón, que aceptó servir de pantalla de los Oblitas Bozovich.
Una de las razones por las que Carlos Díaz entró en el negocio fue porque le garantizaron que Ka’Linson Perú sería contratada, ya que el teniente Leonardo Oblitas Bozovich supuestamente así lo había acordado con el jefe de la Diravpol, el general PNP Alfredo Vildoso. Efectivamente, todas las compras las debía aprobar Vildoso, para quien trabajaba el teniente Leonardo Oblitas Bozovich.
La familia estaba tan segura de que la Diravpol contrataría a Ka’Linson Perú, porque el 23 de marzo del 2020, un día antes de que la unidad policial solicitara las propuestas económicas a los proveedores, le compraron a la compañía Plan Enterprise 20.000 mascarillas descartables Life N95 color negro con válvula. Cuando el 25 de marzo la Diravpol le dio la buena pro a Ka’Linson Perú, los Oblitas Bozovich ya habían internado los productos en los almacenes de la Policía Aérea.
Según el fiscal Francisco Alarcón, las autoridades de la Diravpol sabían que los Oblitas Bozovich estaban detrás de Ka’Linson, porque están registrados los ingresos de Patrick Oblitas Bozovich a la unidad policial en los días de las ofertas de precios. Patrick Oblitas ahora es prófugo de la justicia y su hermano, el teniente Leonardo Oblitas, está preso.
Finalmente, el 11 y 30 de abril del 2020, el jefe de la Diravpol, general PNP Alfredo Vildoso, suscribió dos contratos con Ka’Linson Perú sabiendo que era un negocio de los Oblitas Bozovich, según lo establecido por la fiscalía: uno por 1 millón 117 mil 332 soles y otro por 1 millón 231 mil 673 soles. Un total de 2 millones 349 mil 005 soles en menos de un mes.
La compra incluía 24.000 mascarillas, productos de limpieza y de aseo para el personal policial y pilotos de la Diravpol que se encuentran en primera línea en la lucha contra la propagación del nuevo coronavirus.
Por si fuera poco, las mascarillas vendidas por los Oblitas Bozovich ni siquiera correspondían a las que requirió la Diravpol. Las que entregaron eran mucho más baratas, para obtener más ganancias.
Compra con cadena de mando
”Los oficiales, desde el general Alfredo Vildoso hasta los encargados de las compras, se zurraron en todo el procedimiento que se debió seguir en estos tipos de contrataciones, más aún tratándose de implementos que tienen que ver con la salud del personal policial”, explicó el fiscal Francisco Alarcón.
Ante las evidencias, el fiscal Alarcón consiguió orden de prisión para el general Alfredo Vildoso; el exjefe del Área de Logística, comandante PNP Omar Puente Auccapoma; y el exjefe de Almacén, mayor PNP Jesús Benancio Cisneros; quienes respondieron a órdenes superiores.