Fuente : Diario Expreso
Investigaciones administrativas son sesgadas, y los fiscales, sobre todo del caso Lava Jato, dejan mucho que desear porque no tienen ni una acusación fiscal en cerca de tres años de pesquisas.
Mucho se ha hablado del Club de la Construcción que tiene dos años y medio de investigación judicial, pero estas indagaciones, sea de la Fiscalía, del Congreso de la República o del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi), son sesgadas, y esa es una de las razones de porqué todo va quedando tapado por el manto de la impunidad.
Los fiscales del caso Lava Jato, focalizados en 19 empresas entre 2011 y 2014, y con tres años de investigación, apenas pueden exhibir el acuerdo de colaboración eficaz de la constructora Odebrecht, pero no obstante el cúmulo de pruebas y viajes al Brasil para las audiencias, ni los prometidos “codinomes” han sido entregados ni menos se han abierto los secretos de los ordenadores de los sistemas My Web Day y Drousys que también van pasando al olvido.
