Fuente: Radio Capital
Según Martín Yagui, patólogo clínico del Minsa, el dengue está focalizado principalmente en Comas y Puente Piedra.
El dengue continúa causando preocupación en el Perú. Solo en el interior del país, se han registrado más de ocho mil casos y 12 personas fallecidas producto de esta enfermedad.
Si bien el 90 % de los casos están alojados en los departamentos de Loreto, San Martín, Madre de Dios, Junín y Ucayali, en la ciudad de Lima también se han confirmado algunos casos.
Según Martín Yagui, patólogo clínico del Ministerio de Salud (Minsa), hasta el momento se han notificado 15 casos importados de dengue en Lima y al menos tres casos autóctonos en el distrito de Puente Piedra.
“Sí nos han notificado casos importados provenientes de Loreto y Madre de Dios: 15 casos aproximadamente importados. Y, según lo que ha reportado el Centro Nacional de Epidemiología del Minsa, hasta la semana 7 (febrero de este año), son 3 casos autóctonos en Puente Piedra, por ejemplo”, informó en entrevista con Capital.
Sin embargo, en un correo electrónico al que tuvo acceso el periodista Christian Sotomayor y que habría sido enviado al personal del Minsa, se habla de un total de 16 casos autóctonos.
“Favor de enviar un correo institucional a los médicos jefes de los establecimientos de salud, solicitándoles bajo responsabilidad que prioricen las actividades de prevención del dengue y las actividades de vigilancia y control del Aedes aegypti, programadas en sus jurisdicciones sanitarias, debiendo estar en alerta por la confirmación de 16 casos autóctonos de dengue en la Diris Lima Norte”, se lee en el mail.
Consultado sobre el tema, Yagui indicó que el virus está focalizado básicamente en Puente Piedra y Comas, aunque – afirmó – son “muy pocos casos”.
El correo electrónico que se habría enviado en la interna del Minsa.
¿En qué casos el dengue es mortal?
El especialista indicó que entre el 80 y 85 % de los casos de dengue se resuelve, mientras que el 20 % pueden desarrollar signos de alarma e incluso llegar a la muerte.
Las personas más propensas a fallecer son los pacientes con comorbilidades y enfermedades crónicas como hipertensión, problemas respiratorios y cardiovasculares, embarazadas y niños pequeños.
