RCR, 05 de Julio 2022 .- Jorge Alberto Timaná Rojas, master en Ingeniería en la Universidad British Columbia – Canadá y especialista en transporte e ingeniería vial, sostuvo que la deficiencia en la gestión pública ha generado un caos general en el transporte urbano. Planteó que la solución al problema depende de la voluntad de los gobiernos y por establecer políticas de Estado.

“En el Perú sufrimos desde hace mucho tiempo del caos, de informalidad y de desorden. Lima está intentando a través de esta autoridad, el problema es de gestión y la falta de gestión genera desorden. Y engloba todo, la organización del sistema de transporte, la infraestructura, el desarrollo de la infraestructura integrado para poder lograr una movilidad adecuada. Estamos atrasados con respecto a países vecinos”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

Remarcó que el tema pasa por decisiones de gobierno, por voluntad política y por políticas de Estado. “Ahí se juntan muchos temas, porque en el transporte, por ejemplo, una de las consecuencias de este desorden en la seguridad es la seguridad vial y la seguridad ciudadana. En seguridad vial Perú es uno de los países en la región donde tenemos todavía niveles altos de muertes y de daños en accidentes de tránsito”, indicó.

“El problema principal es que a lo largo del tiempo no se le ha dado la debida importancia y el debido tratamiento, que además de políticas públicas, implica recursos económicos y humanos. Los municipios y las autoridades encargadas del del transporte tienen muy pocos recursos humanos y muy poco presupuesto para poder atender todas las demandas que requiere la población”, apuntó.

Observó que este problema viene de muchos años y se ha agravado ahora por el tema de la crisis económica en la que estamos viviendo. “Si el transporte urbano si bien es cierto en la capital desde hace algún tiempo se cuenta con una nueva forma de gestión, nosotros en provincias, por ejemplo, en Piura, seguimos con la problemática urbana de movilidad, que depende todavía de los municipios con todas las limitaciones que eso implica”, precisó.

“La clave está en eso, en que no es integrado, no se trata como un sistema integrado. Cada sector tiene sus propias demandas. En las ciudades, por ejemplo, vemos los mototaxistas, los taxistas, los buses, las Combis y el nivel de informalidad que existe también hace que la situación sea más complicada”, explicó.

Manifestó que, en caso del transporte formal, la organización de las empresas de transporte público también dificulta un ordenamiento. “La formalidad hasta cierto punto no logra que el resultado final el servicio, la población digamos merecen un buen servicio y no se logra. Una clave es tratar el tema como un sistema integrado y eso, no se da hasta ahora y viene de mucho tiempo”, subrayó.

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