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CRITICAN VISITA PROSELITISTA DE EMBAJADOR DE BOLIVIA A CAJAMARCA

Jorge Vergara Quiroz, past presidente de la Cámara de Comercio y la Producción de Cajamarca, afirma que Gregorio Santos quiere parecerse a Evo, pero mientras en Bolivia explotan sus recursos minerales, en el Perú se oponen a las inversiones que sacarían a la región de la pobreza.

RCR, 24 de enero del 2018.-La visita “protocolar” del embajador de Bolivia en el Perú, Gustavo Rodríguez, no tuvo nada de tal, sino que se convirtió en una reunión proselitista coordinada por la dirigencia del Movimiento de Afirmación Socialista (MAS), que controla el gobierno regional, en favor del Movimiento Al Socialismo (MAS), buscando proyectar una visión de culto de Evo Morales, denunció Jorge Vergara Quiroz, past presidente de la Cámara de Comercio y la Producción de Cajamarca

“No estamos de acuerdo que las autoridades del gobierno regional de Cajamarca hagan proselitismo asolapado ensalzando la figura del presidente Evo Morales, quién en una actitud de autócrata y dictador, quiere perpetuarse en el poder postulando a las elecciones en Bolivia por un cuarto período presidencial, a pesar que el pueblo en un referéndum le dijo ¡NO! A sus intenciones re-re-reeleccionistas”, sostuvo, Vergara.

Esa es la costumbre de la izquierda latinoamericana, dijo, ya pasó algo similar en Nicaragua, con el ex guerrillero Daniel Ortega, ni que decir con el “chavismo” y su títere Maduro en Venezuela, y ahora en Bolivia con Evo Morales. Todos han utilizado la democracia para tomar el poder, y una vez logrado, mantenerse indefinidamente recurriendo a leguleyadas y usando la fuerza de las armas.

PARADOJAS

Sin embargo, se percibe un contraste marcado entre las posiciones del MAS de Evo, y el MAS   cajamarquino, pues el presidente Morales explota sus recursos naturales, gas, petróleo, pero sobre todo minerales, como gran productor de litio que es el país altiplánico; mientras que en el Perú los adeptos de “Goyo” Santos no permiten que la región se desarrolle y crezca a través grandes capitales que quieren invertir en minería responsable, manteniendo a su población sumida en la pobreza y en los últimos lugares de desarrollo socioeconómico.

En ese sentido, el empresario saludó la próxima subasta internacional del proyecto minero Michiquillay, que llevará a cabo ProInversión que representa una inversión de US$ 2,500 millones de dólares, inyección de dinero que los cajamarquinos necesitan con urgencia.

“En Cajamarca es fundamental dar un gran cambio, y promover economías de mercado que sean capaces de atraer capital local, nacional y del extranjero. Evidentemente, de la mano con la agricultura pero no solamente con producción para el mercado local, sino buscando ingresar a los mercados internacionales mejorando la calidad de los productos, por ejemplo el aguaymanto, y aportando valor agregado”, concluyó.