RCR, 11 de junio de 2025.- El economista Víctor Vargas señaló que el 50% de la población económicamente activa en Cajamarca se encuentra en la informalidad, reflejando la falta de alianzas estratégicas entre el Estado y el sector privado. Agregó que impulsar inversiones mineras formales evitaría la expansión de la minería ilegal que se ha situado en la región hasta la frontera con Ecuador, y que trae consigo delitos como la trata de personas y el crimen organizado.
“Gran parte de la economía de Cajamarca es informal, aproximadamente de las 430 mil personas económicamente activas, un 50% se encuentra en la informalidad. Sin embargo, en eventos tan específicos como el carnaval, se genera una buena cantidad de empleo en los servicios, pero que son coyunturales, no de carácter permanente, y eso hace que la situación vuelva a su cauce normal de informalidad”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Precisó que gran parte de la informalidad está concentrada en sectores agropecuarios, donde cerca de 165 mil productores trabajan sin acceso a derechos laborales ni cobertura tributaria adecuada. Afirmó que, si se promoviera la formalización a través del régimen de trabajador independiente formal, un tercio de la economía regional dejaría de ser considerada informal, lo que permitiría una visión más realista y alentadora del desarrollo económico local.
“Si se aprovechara el régimen tributario de trabajador formal independiente, la economía de Cajamarca dejaría de ser informal, en lo que se refiere al empleo. Entonces, hay opciones de mejorar esta situación, de mejorar las políticas públicas, porque eso nos ayudaría a que la economía de sea más formal, por lo tanto, más productiva y resolvería los altos niveles de pobreza”, expresó.
Vargas sostuvo que, una de las actividades económicas que genera mayor empleo es la minería, sin embargo, sectores como la construcción y el turismo suelen ser temporales o estacionales. Por lo tanto, consideró necesario mejorar la calidad del servicio, de la producción, manufactura, comercio y otros servicios, que ayuden a resolver el empleo formal.
“El sector público juega un rol esencial, puesto que la obra pública es clave como parte del dinamismo del sector construcción. Y una buena programación de obras, podría ayudar a complementar el empleo rural, porque si bien está presente, tiene espacios muertos por la falta de siembra y cosecha”, anotó.
En ese sentido, destacó que las alianzas público y privada son impredecibles para impulsar el empleo. “Necesitamos trabajar de manera para brindar mejores oportunidades, pero también mejorar el servicio público, especialmente por el lado de la educación, que es la que finalmente termina calificando la mano de obra”, enfatizó.
Por otro lado, alertó sobre la expansión de la minería ilegal en Cajamarca, fenómeno que calificó como un “síndrome” que atraviesa el departamento desde la frontera con Ecuador hasta el sur. Comentó que esta situación no solo daña el medio ambiente, sino que también fomenta delitos como trata de personas y crimen organizado.
“El gobierno regional, las municipalidades y el gobierno nacional tienen que negociar con el sector minero, para impulsar mayores inversiones, de lo contrario, seguiremos dándole espacio a la minería ilegal. El Estado tiene que jugar un rol importante para fortalecer la participación del sector privado”, manifestó.
Finalmente, remarcó que la pobreza monetaria en Cajamarca ha liderado este indicador en siete de los últimos diez años, y esto se debe en gran medida a la débil articulación entre los sectores público y privado. “Mediante una estrategia concertada que fomente inversión, empleo formal y fortalecimiento institucional se podrá reducir la pobreza estructural y avanzar hacia un desarrollo sostenible en la región”, subrayó.
