RCR, 24 de Marzo 2024 .- Jesús Manya, director de la revista Amaro, sostuvo que las autoridades regionales del Cusco no tienen una mirada de largo plazo para impulsar la diversificación productiva en la región, pese a su alto potencial en el rubro de la agroexportación. Señaló que el Gobierno debe impulsar políticas industriales, productivas y de integración vial en todo el departamento, yendo más allá de la visión turística.
“Falta una mirada de largo plazo de las autoridades regionales. A veces se enfrascan solo en hacer cemento y piedra, pero no le dan la prioridad, por ejemplo, al tema de lo que es la diversificación y la revolución productiva, que es ahora un tema central, no solo en el Perú, sino en toda la humanidad”, dijo en el programa “Perú 2030” de RCR.
Sostuvo que en el Cusco existe una población económicamente activa muy grande en el sector agrario y las inversiones públicas en el sector son escasas. “Recién se están aplicando algunas políticas muy concretas para el tema de la papa, la piña y otros productos no de exportación sino básicamente de consumo”, indicó.
“En los últimos 10 años por ejemplo recién ha ingresado la palta como un factor de exportación y de producción, pero eso ha sido producto de la iniciativa de los agricultores de Anta, de todo el corredor de Anta, Mollepata, etcétera, de todos los distritos que hay de Anta, como quién se va a Apurímac”, expresó.
Destacó que se ha recuperado en los valles amazónicos el café orgánico y el cacao, que han ingresado al proceso de exportación. “Ese es uno de los reproches también que hay en la parte amazónica en La Convención. A pesar de que la provincia ha recibido ingentes cantidades producto del canon las municipalidades se han dedicado a sembrar cemento y no han tenido políticas agrarias de productos amazónicos importantes”, afirmó.
“El gobierno regional le da apenas el 10% del conjunto del presupuesto al ámbito de agricultura, cuando en cemento se gastan el 50%, probablemente sea por la rentabilidad para los bolsillos de las autoridades, porque no tiene otra explicación”, precisó.
Remarcó que se deben impulsar políticas industriales, productivas y de integración vial, etcétera, yendo más allá de la visión turística. “La Cámara de Comercio y la Cámara de Turismo creen que el Cusco vive solo del turismo cuando es apenas el 7% del producto bruto que genera riqueza en el Cusco. Es decir, nada significativo en el conjunto de la economía en el Cusco”, observó.
También dijo que no hay un proceso serio de integración de la Macro Región Sur. “Necesitamos articular nuestras energías con Puno, Arequipa, el Macro Sur. No se puede desarrollar el Cusco única y exclusivamente en su periferia. Necesitamos articulaciones de esa naturaleza, pero son poco o casi nada los trabajos en esa perspectiva. No hay una mirada regional del Macro Sur y eso nos afecta pues severamente”, apuntó.
“Los grados de corrupción nacional que también son similares. A veces la vieja política se replica en las regiones y entonces los procesos penales, judiciales y encarcelamiento que hay de las autoridades regionales y de muchos funcionarios alcaldes generan también un grado de desconfianza terrible en lo que pueda significar la regionalización”, subrayó.
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