RCR, 21 de agosto 2025.- Christian Barrantes Bravo, viceministro de Construcción y Saneamiento, señaló que trabajan articuladamente con el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Economía, gobiernos subnacionales, empresa privada y la academia para impulsar proyectos como la presa de Chonta, que permitirá dotar de agua a la región de Cajamarca.
“En Cajamarca trabajamos articuladamente con gobiernos locales, empresa privada y la academia mediante mecanismos como obras por impuestos, ya se han firmado convenios para cofinanciar pozos tubulares, mientras se avanza en el proyecto de la presa Chonta y 36 obras más en ejecución, de los cuales, 30 de ellas se encuentran en zonas rurales”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Precisó que este año han firmado un convenio junto al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego y el Ministerio de Economía y Finanzas, de manera que, cada uno intervenga en su competencia con el compromiso de asegurar agua potable para Cajamarca. En ese sentido, aseguró que la presa de Chonta es un proyecto que permitirá dotar de agua potable a la región.
“Hemos firmado un convenio junto a la empresa privada para cofinanciar los pozos tubulares, al igual que la presa de Chonta, que venimos avanzando junto al MIDAGRI, porque queremos solucionar la problemática del déficit hídrico. A nosotros nos corresponde desarrollar los estudios para que se ejecute en la línea de conducción de agua potable”, expresó.
En lo que respecta a la empresa privada Newmont Yanacocha está colaborando en varios proyectos de agua para mejorar el abastecimiento y la calidad de vida en la región. Algunos de estos proyectos incluyen el avance en la búsqueda y el desarrollo de agua subterránea en Ajoscancha, así como el avance en los estudios y la ejecución de la Presa Chonta. También el sistema Qhapac Ñan, que ha mejorado el agua potable en la ciudad, en colaboración con el gobierno local y Sedacaj.
Barrantes indicó que este año se ha reactivado la figura de asociaciones público-privadas en agua y saneamiento, en este caso junto a Proinversión tras la próxima adjudicación de una planta de tratamiento de aguas residuales para Cajamarca y Baños del Inca. “Hemos retomado esta alianza con el objetivo de dar soluciones reales a problemas estructurales, esperamos que en los próximos 90 días se pueda firmar un contrato con el proponente de esta obra”, enfatizó.
Asimismo, el viceministro destacó los avances en vivienda social y servicios básicos durante la actual gestión, asegurando que se han ejecutado más viviendas sociales que en gestiones anteriores. Sin embargo, subrayó que el verdadero salto cualitativo está en el número de obras de agua y saneamiento.
“Esta gestión ha podido trabajar y culminar más de 593 obras de agua y saneamiento, que es realmente un valor, un número de proyectos muy importante. Actualmente, estamos ejecutando casi 400 proyectos más que van a poder impactar directamente en el acceso al agua y saneamiento, que es un recurso fundamental como base para el desarrollo del país”, mencionó.
Entre los proyectos emblemáticos mencionados, resaltó la intervención integral en Juliaca, donde ya está en licitación una planta de tratamiento de agua potable. Mientras que, en Piura, una de las regiones más afectadas por la falta de agua, se ejecutan obras por más de 2 mil millones de soles, incluyendo la esperada planta de Curumuy y la habilitación de redes en 105 asentamientos humanos de Piura y Castilla, tras décadas de espera.
“Nuestra meta es que podamos generar suficiente impulso, considerando que el año pasado hemos ejecutado 45% más de lo que ejecutaba el Ministerio de Vivienda en su mejor ejecución durante toda su historia, la idea es seguir impulsando estas iniciativas para que los gobiernos mantengan el mismo ritmo, de esa manera, podamos antes del 2040 cerrar totalmente la brecha de acceso al agua potable y saneamiento”, anotó.
Finalmente, remarcó el impacto social de estas obras, especialmente en salud y educación. “Las enfermedades diarreicas, la anemia, la deserción escolar, todo eso disminuye cuando una familia accede al agua potable. Y además hay un alivio económico, porque las familias sin red pagan hasta cuatro veces más por menos agua”, concluyó.